Los materiales con textura rugosa, a menudo son de tacto basto y abultado. Al pasar una mano por ellos, podemos notar esa aspereza -no siempre tiene que ser molesta- y eso el algo que podemos querer resaltar u ocultar (en un retrato solemos esconder las texturas que nos resaltan las imperfecciones), pero que indudablemente caracterizan esa superficie.
Fotografía de Alberto González
Fotografía de Domingo Díaz
Para fotografiarlos y destacar esa cualidad que nos recuerda la experiencia "táctil" de esa materia, la iluminación que usemos deberá de ser dura. lateral y lo más rasante posible a la superficie.
Calidad de la luz
La luz deberá de ser dura, pues las luces de este tipo producen sombras claramente visibles y definidas. Cada irregularidad y relieve (o bajorrelieve) de nuestro material, tendrá su sombra correspondiente.
Fotografía de Ani Ramírez
Eso hace que estas zonas queden como "subrayadas" y resaltadas, destacando así la calidad de esa superficie. Esto no lo conseguiríamos con una luz suave que envuelva y cuyas sombras sean o inexistentes o poco visibles.
Que la luz sea o no dura, depende básicamente del tamaño del haz de luz que estemos usando.
Una luz suave procede de una gran fuente de luz, y una luz dura, de una pequeña y puntual. Si no sabes a qué me refiero con luz dura y suave, lee esto.
Posición de la luz
Para que las sombras "resaltadoras" se vean, no podemos poner la luz en cualquier sitio, debemos situarla a conciencia.
Fotografía de Lucía Suárez
Como dice el fotógrafo de este vídeo que os dejo abajo, la textura se apreciará en tanto en cuanto nos alejemos con la luz del eje de la visión de la cámara, tanto en el sentido horizontal como vertical. Lo verás claro si pones el video a partir del minuto 5:34 (antes habla del retrato, pero luego pone un ejemplo de papel arrugado).
Eje Horizontal
Respecto al eje horizontal una luz lateral, a 90º (o cercana a esa posición, siempre que esté por delante de la pieza), proyecta sombras en el lado opuesto del relieve, con lo cual se quedarán dentro de nuestro campo de visión.
Eje vertical
Respecto al eje vertical, debemos de procurar que la luz "roce" la superficie que queremos destacar.
Está claro que si tenemos un objeto con superficies en distintos planos, no todos ellos saldrán beneficiados por esta posición rasante -osea. al ras- , así que escogeremos la cara más significativa de nuestro objeto, la que más queramos destacar en nuestra fotografía.
Distancia
Cuando ponemos una luz dura y lateral, podemos encontrarnos con que el objeto, aunque resalte la textura, se vea demasiado contrastado en su totalidad. Me refiero a que la zona más a alejada de la luz esté muy oscura (quizás totalmente en sombra) y la más cercana, tenga una luminosidad demasiado intensa.
Esto puede solucionarse alejando bastante la fuente de luz de nuestro objeto. Si, ya sé que puede parecer algo extraño, pero así la diferencia entre las dos zonas del objeto no será tan exagerada.
Algunos solucionan este problema colocando un reflector al lado opuesto de la luz. No es la solución mejor, y no os lo recomiendo. Si optáis por esto, no lo coloquéis muy cerca, pues rellenará tanto que la figura perderá el resaltado de la textura y algo de volumen y, si el objeto es una superficie plana (una pared, un cartón etc). hará que la textura casi se elimine.
El cristal, o mejor dicho, el vidrio (no es lo mismo pero para el público en general, son sinónimos), es un material complejo de iluminar.
Sabemos que brilla, y que es fácil que en un objeto de vidrio se produzcan "destellos" molestos que nos impiden ver con claridad la forma de la pieza.
Además de ser muy reflectante, a los vidrios transparentes se le añade una dificultad más: al atravesarles la luz, es fácil que las formas se "diluyan".
Para hacer una foto de una pieza de vidrio con bordes definidos, con resultados profesionales, hay que tener en cuenta sus especiales características y llevar a cabo un protocolo de actuación que iremos viendo a lo largo de esta entrada.
En objetos de vidrio debemos actuar sobre:
1. La Presencia
Imágenes extraídas de seraporfotos.blogspot.com
- Hay que tener y mantener la figura libre de suciedad y desperfectos (a no ser que éstos sean algo característico que queramos resaltar). Si no cuidamos ese aspecto, al mirar la toma en la pantalla del ordenador, nos encontraremos con una imagen inservible en más de una ocasión.
Para evitarlo, manipularemos con cuidado. Es útil usar un trapo de algodón tipo tela de sábana blanca antigua, pero siempre que no deje pelusas, o bien los guantes del súper para escoger la fruta, jejeje.
2. La Calidad de la luz
Hay que intentar evitar que se nos descontrolen los reflejos especulares directos. Si te suena a latín, lee esta entrada.
Por tanto, conviene que la luz sea suave y difusa -NO CONFUNDIR con POCA LUZ- y ésta se obtiene de una fuente de luz de tamaño grande.
Se consigue o bien rebotando la luz en una superficie reflectora cualquiera, o haciendo que ésta atraviese un papel o una tela blanca fina, un metacrilato blanco traslúcido (hay mesas de ese material, usadas para fotografía de bodegones).
Mesa de bodegones traslúcida
mesa de bodegones traslúcida usada aquí para fotografiar vidrio
También se logra poniendo un accesorio en el foco como una ventana, un difusor blanco traslúcido, etc.
Ventana para suavizar la luz
Otra opción es usar unas tiendas de luz, que son cajas de paredes blancas que permiten el paso de la luz y la suavizan (se puedes fabricar de forma artesanal sin necesidad de ser muy habilidoso, con una caja de cartón y entretela blanca o algo similar, en la red hay muchos tutoriales).
Caja o tienda de luz pequeña
3. La Polarización (o no) la luz
Hay un tipo de reflejo producido en determinados materiales por la luz, -que es que hace que nos veamos reflejados en la figura de cristal- que puede estorbarnos.
Para ello, y NO es siempre imprescindible (en piezas transparentes sin contenido no suele ser necesario), podemos usar un Filtro polarizador, que hace que se eliminen.
Filtro polarizador aplicado a la fotografía de producto
4. La Posición de la luz
La luz principal (si no sabes a qué me refiero, pincha aquí) para iluminar vidrio transparente, se sitúa a unos 180º aprox. (no hace falta poner un transportador de ángulos, sólo pon la luz trasera) del eje cámara-pieza, ósea a CONTRALUZ.
Vamos, que ponemos el foco por detrás, para que la luz atraviese la figura y llegue a la cámara.
Se puede poner de forma que desde la cámara pudiéramos visualizar la luz encendida. Si tenemos accesorios modificadores para suavizar puestos en el foco, esa será la mejor opción -hay otra-.
La otra opción es apuntando a un fondo claro que refleje la luz, ósea, que la luz salga hacia atrás y rebote dando de forma indirecta en la pieza. En este caso, se pone el foco algo más bajo que la pieza a iluminar y hacia arriba, para que así no salga en el encuadre y estorbe en la toma.
Esa es la opción que usaremos si no podemos usar modificadores de luz y acudimos a rebotar la luz para hacerla más suave. Es un poco más incómoda (hay que encontrar una distancia al fondo adecuada para que el haz de luz tenga el tamaño adecuado), pero igualmente válida.
Campo claro y oscuro
Existen básicamente dos formas de fotografiar las piezas de vidrio transparentes; con fondo claro y con fondo oscuro.
Las dos formas de hacer estos ¨campos son en realidad muy similares aunque el procedimiento es en algunos detalles, diferente:
A la izquierda, iluminación de campo oscuro, y campo claro a la derecha.
Campo claro y oscuro
Campo Claro
Esta opción tiene el fondo claro, casi siempre blanco -puede hacerse también con fondo de color como en estos ejemplos- y los bordes de la pieza oscuros.
Foto de Cristian Lagares
Para conseguir la fotografía correcta, debemos de seguir metódicamente estos pasos (no olvides los iniciales que ya antes se han descrito).
1. Fondo
Escogemos un fondo claro para nuestra foto. Puede ser traslúcido si vamos a iluminarlo de forma que lo atraviese la luz, o bien opaco, si vamos a hacer que rebote en él la luz.
El fondo puede ser la parte blanca de un softbox como este
Difusor blanco para poner delante de la luz. Puede ser nuestro fondo
Fondo blanco para fotografía.
Al ser opaco, esta sería una opción para que la luz "rebotara" en él
2. Luz
Iluminamos el fondo poniendo el foco frente a la cámara, (ojo, entremedio luego irá más adelante la pieza de vidrio).
Con fondo traslúcido, atravesado por la luz, el foco tendrá la lámpara mirando a la cámara.
Es más, el mismo material que sirve para difuminar la luz, será nuestro fondo -como ya comentamos antes-.
En el dibujo que os he puesto, sería la parte blanca de la ventana o softbox. pero podría ser un simple difusor blanco delante del foco, o la parte vertical de una mesa de bodegones traslúcida actuaría igual.
Mesa de bodegones de fondo traslúcido
Con fondo opaco (no le atraviesa la luz), el foco apuntará al fondo. Aunque parezca un poco raro, la reflexión hará que esa luz llegue a nuestra figura cuando la coloquemos, tranquilos.
Flash de zapata apuntando a un fondo blanco opaco
Si no sabes inglés (yo tampoco), activa los subtítulos traducidos al español ene este breve vídeo, y visualízalo.
3. Cámara
Colocamos AHORA la cámara encuadrando EXACTAMENTE el fondo, que no puede ser mayor ni menor que nuestro encuadre. Esto parece un poco radical sí, pero nos ahorrará muchos ajustes si lo hacemos desde el comienzo así.
Si no disponemos de un fondo lo suficientemente pequeño, ajustado al encuadre elegido, podemos TAPAR con paneles negros (rígidos, mejor olvidaos de cartulina fina o tela) la superficie de ese fondo, haciéndolo de esa manera más reducido, y consiguiendo la deseada definición de los bordes de la figura.
Bordes sin definir por excesivo tamaño del fondo respecto al encuadre.
Imagen de Miguel Páez.
Bordes definidos ajustando el tamaño del fondo al encuadre.
Imagen de Miguel Páez.
Puedes incluso construir una especie de puente/tunel con cartones para encajonar la pieza:
Otra opción es conseguir que la luz sólo afecte a una zona del fondo, aunque éste sea mayor. Si el foco proporciona una luz concentrada, podríamos conseguirlo.
Sería factible colocarle un accesorio que concentre la luz como un snoot, o incluso un simple "cucurucho" de cartulina negra alrededor del foco para que la luz nos extienda mucho (tapando sólo la parte delantera del aparato, con cuidado para que no se recaliente).
Flash de estudio con snoot
Y si vas a intentarlo con un flash de zapata, puedes poner el zoom del cabezal con la opción de ángulo más cerrado que te permita: 180 mm, 135 mm, 105 mm, o 85 mm (según qué modelo tengas).
Así sale la luz de tu flash de zapata según le pongas el zoom del cabezal
Hay que tener en cuenta, que el tamaño del fondo es una cosa relativa si modificamos la distancia de éste a nuestra cámara.
Si habéis escogido un objetivo tele, igual necesitáis más espacio para trabajar...
5. Colocar Objeto y enfocar
Pon la pieza (acuérdate de las recomendaciones de limpieza) a una distancia determinada que te guste para el encuadre que ya tienes preparado.
Para una mayor definición de los bordes, te interesará que esté más cerca de la cámara que del fondo.
A veces puede costar un poco usar el enfoque automático, sobre todo cuando no hay mucho contraste en la escena -igual te devuelve un pitido y no te deja ni disparar-.
Si no te fías de hacerlo con el enfoque manual, pon justo delante del objeto una mano, o una revista o algo que sí contraste con la escena y quede a la misma distancia de la cámara, y enfoca cómodamente. Luego desconecta el autofoco (ya no lo necesitarás si no modificas las distancias), o bien bloquea el enfoque (AF Lock) si sabéis.
6. Calcula la exposición y dispara
Mide la exposición. Si puedes, con un exposímetro de mano, que te deje medir la luz incidente.
Si usas flash, deberás poner esa modalidad en el aparato. No puedes medir la luz de un flash con el exposímetro de la cámara, pero si no dispones de exposímetro adecuado, dispara una toma para comprobar la exposición sobre el histograma que te salga en la foto disparada, y ve corrigiendo según sea éste (debe llegar al blanco, pero no sobrepasarlo).
Para situaciones complejas en el estudio, siempre recomiendo tirar en raw+jpeg (o sólo raw) y hacer varias tomas "horquilladas": me gusta hacer una primera con el histograma que llegue justo al blanco, y luego abrir un tercio del diafragma, y a continuación, otro tercio más.
Aunque a priori pueda parecer que vamos a quemar la foto, a menudo esto no ocurre, y tiene mejor aprovechamiento el archivo con mayor cantidad de luz (al revelarlo podemos sacar más matices).
Además, en muchas ocasiones, el histograma que vemos en la cámara, difiere del que obtenemos en el archivo raw, por lo que siempre es más prudente realizar varias tomas horquilladas (bracketing), pero yo recomiendo no hacer nunca tomas cuyo histograma no llegue al blanco, y menos en este caso en el que la escena tiene un fondo de ese color.
Campo Oscuro
Esta opción tiene el fondo oscuro -casi siempre negro- y los bordes de la pieza claros.
Montajes de vidrio de campo oscuro, con "un toque de color"
Para conseguirlo, hay que seguir estos pasos en este orden:
1. Luz
Esta vez empezamos por la fuente de luz. Colocaremos a contraluz un foco de calidad difusa (suave), que pueda cubrir sobradamente iluminando la pieza de vidrio.
Ya sabes, o bien mirando hacia nosotros, o del revés (según si vamos a hacer pasar la luz por un accesorio difusor o vamos a reflejarla).
2. Fondo
Colocamos un fondo oscuro y opaco para que tape parcialmente nuestra luz a su alrededor (no es necesario un tamaño exacto de fondo, pero luego deberemos ajustar el encuadre).
Ventana de luz con cartón negro de fondo
Aquí vemos un fondo negro "empequeñecido" con cartones blancos
Recuerda que siempre está la opción de que rebotemos la luz, que la usamos cuando no disponemos de nada que pueda hacer que ésta sea difusa. En ese caso colocamos la luz mirando al fondo donde rebotará:
O bien con dos luces apuntando a unos paneles reflejantes que coloquemos por detrás de la figura, a ambos lados (es algo más incómodo, pero también vale), tapando los laterales con paneles negros para que no se refleje el estudio de alrededor:
3. Cámara
Colocamos AHORA la cámara encuadrando el fondo (ajustando, que no se vea ni nada más, ni mucho menos).
5. Colocar Objeto y enfocar
Pon la pieza de vidrio ahora (con limpieza hecha) y a una distancia adecuada al encuadre que ya tienes preparado.
Esta foto está hecha con un flash de zapata rebotado en un fondo blanco,
y con unos cartones a los lados, como véis, todo muy "casero"
Para una mejor definición de los bordes, mejor que esté más cerca de la cámara que del fondo.
Enfoca.
6. Calcula la exposición y dispara
Mide la exposición en los bordes de la figura -tampoco hay que ser muy estricto con esto, pero mide para que el histograma siempre llegue al blanco sin pasarse).
Si puedes, con un exposímetro de mano, que te deje medir la luz incidente. Si no, con el de tu cámara, y comprobando que el histograma es correcto (puedes hacerlo esa comprobación en el Live view aunque a veces es más operativo disparar y comprobar, pues es más rápido)
Dispara un par de tomas más, variando ligeramente el diafragma para poder elegir luego con tranquilidad cuando veas la foto en tu ordenador (las pantallas a veces son demasiado pequeñas para apreciar ciertos detalles, y no cuesta nada hacer un horquilla, también llamado bracketing).
Fotografía de Sara Carrasco Díaz
Aquí se utiliza un flash de zapata y da varias opciones (no todas son de mi gusto, prefiero la última jeje):
7. Revisa los posibles "flare"
En ocasiones puede producirse una especie de neblina procedente de lo que se denomina "luz parásita que se cuela por el objetivo". Es un tipo de "flare" muy molesto que debemos evitar.
Primeramente, quita el filtro que te vendieron para proteger el objetivo. Solemos gastarnos poco, y puede ser el causante de que esa luz molesta se haga más visible.
Si no tienes filtro, pero sí tienes parasol, déjalo puesto siempre que tengas una luz que le llegue de frente al objetivo, y eso ayudará también a evitar la neblina.
¿Sigue saliendo?. Pues debes crear una especie de túnel con cartones negros alrededor de la figura (incluso puedes ponerle un techo ni es necesario). No lo cierres herméticamente, porque algo de luz debe entrar para hacer la foto...
¿Continúa?. Intenta poner alrededor de tu objetivo una cartulina o goma eva negra enrollada, pero que no tape la visión de nuestro encuadre. Cuanto más largo, más posibilidades de que detenga el flare, pero más difícil que no estorbe...Mira cómo lo hace este fotógrafo.
Campo Claro y Oscuro "simultáneo"
Mezclamos las dos opciones, de forma que en unas zonas sean bordes claros y en otro oscuros.
Es en realidad más cercano a un Campo Claro -y los pasos que debéis dar son los mismos que para éste-, que pierde luz (o no le llega) por algunas zonas, donde actúa como Campo Oscuro.
En este ejemplo, la luz le viene desde unos focos puntuales traseros que rebotan en dos pequeños reflectores plateados.
¿Y si quiero volumen?
Pues hay que complicarse un poquito más... Quizás no tengamos bastante con un foco, pues así sólo destacamos el contorno.
Este puede ser el caso tanto si iluminemos una sola pieza, como si en nuestra composición aparezcan otros objetos de otro tipo de material.
Con y sin luz de relleno para las hojas
Además de la luz principal en la parte de atrás, podemos añadir alguna otra luz -generalmente lateral- que nos aporte un reflejo que dé más idea del volumen de la pieza.
Es la última luz en colocarse, ya que es algo complementario al montaje.
Con y sin reflejo lateral. Imagen de expertphotography.com
No se puede olvidar que conviene que sea difusa (ya sabes, o la haces pasar por algún tipo de accesorio que la suavice, o la rebotas para que al menos no llegue a la figura de forma directa), porque el material sigue siendo el mismo, y una luz dura nos provocaría destellos puntuales poco estéticos.
Campo oscuro con reflejo lateral
Realmente podemos complicarnos mucho -tanto como queramos- consiguiendo un atractivo "modelado" de la pieza de vidrio.
Aquí os dejo un ejemplo donde el fotógrafo trabaja una botella de licor (con etiqueta, tapón y líquido oscuro, que es menos simple que sólo vidrio vacío) con un sólo foco: hace varias tomas, y luego "apila" estas imágenes en distintas capas de un mismo archivo de Photoshop, y enmascara las zonas que le interesan, dejando ver los distintos efectos y brillos que va creando en el estudio en cada foto. Es más sencillo de lo que puede pareceros, y el resultado es espectacular:
Este tipo de técnicas basadas en varias tomas son muy habituales en fotografía de producto, ya que hay efectos que no se pueden conseguir siempre partiendo de un sólo disparo, y de esta forma se le saca mucho partido a las figuras (y encima, podemos ahorrarnos algunos focos, consiguiendo una iluminación muy completa usando sólo nuestro pequeño flash de zapata, je je).
Trucos y consejos
Hay algunas cosillas más que pueden veniros bien saber para hacer este trabajo.
Soporte
Una de las decisiones a tomar es sobre qué apoyamos la pieza para que la imagen quede más estética:
Una mesa o un soporte de metacrilato o plexiglás -traslúcido o no, blanco o negro-.
Copa sobre mesa de metracrilato blanco
(con fondo "curvo" o sea, continuo).
Fotografía de Diego Barrera
Copas sobre mesa de metacrilato negro.
Se deja ver la línea de horizonte, ya que no es un fondo continuó
O también podría ser otro vidrio, un espejo, e incluso otra pieza "gemela" puesta bocabajo, como soporte....
Soportes de cristal transparente, que dejará ver el fondo por debajo
Copa apoyada sobre otra copa invertida. Foto Milena Carrasco
Estas son formas de que la línea del horizonte o "corte" de la mesa sobre la que apoyamos las figuras, no se vea o sea más estético.
Si lo hacemos de forma "casera" y low cost, se puede acudir a un fondo de foamy o papel que coloquemos de forma continua. sin cortes:
No os aconsejo telas, porque a menudo se ven las arrugas y no suelen quedar bien (a no ser que os interese esa textura, claro).
Líquidos
¿Y si añadimos unos líquidos a los recipientes de vidrio como en las botellas de ciertas bebidas?.
Pues si el líquido no deja que la luz le traspase, la zona donde hay líquido nos puede quedar algo oscura, con lo que deberíamos "rellenar" de luz con el uso de un reflector, o bien de una luz secundaria puntual dirigida a esa zona, y situada en un lateral o de frente a la pieza.
Si el líquido sí deja que pase parte de la luz, es traslúcido, se puede hacer una plantilla de cartón blanco o plateado/dorado, a modo de silueta con la forma del recipiente -de la parte que contiene el líquido- y la situamos por detrás del objeto.
Además de la luz principal de nuestro montaje, apuntaremos a esa plantilla y la iluminaremos con una luz puntual, para que refleje la luminosidad suficiente y rellene la figura con la claridad resultante de esa reflexión.
Si no se pueden quitar, debemos rellenarlas con una luz secundaria, igual que con el líquido no traslúcido.
¿Al hacerlo te ha salido un destello horrible en la botella?. No descartes la toma.
Usalá para reproducir solo esa parte, apilando las imágenes en dos capas de photoshop (una será la de la etiqueta iluminada, y la otra la de la botella con la etiqueta oscura), y con una máscara de capa, descubre la parte de cada toma que más te interese.
Ya has podido verlo en el vídeo de la botella de whisky que te puse más arriba.
Práctica
Te propongo que escojas un recipiente de vidrio transparente (con o sin color) para hacer tu primera foto de campo claro o de campo oscuro (tú eliges). Para iniciarte, no te compliques, y busca algo que no sea muy irregular en el grosor de sus paredes. Es también algo más complejo de fotografiar, una figura tallada o con dibujo en relieve, y ya hemos hablado de que las etiquetas añaden dificultad... tú mismo/a.
Tu meta será conseguir una definición de la pieza gracias al borde, por lo que el contorno deberá ser una línea completa y sin cortes. No olvides cuidar el WB, el enfoque y la profundidad de campo, y sobre todo, dispara en raw+jpeg, siempre teniendo como referencia el lado derecho del histograma: en el jpeg no te quedes corto ni te pases del blanco.
Realiza un esquema gráfico de iluminación -limpio y claro, que coja toda la hoja A4) que contenga todos los elementos y datos de distancias, alturas y ángulos de la luz respecto al eje cámara-objeto. En el archivo que lo guardes, incluye los datos de exposición y los de tu equipo usado.
No olvides incluir en la misma hoja PDF una reproducción pequeña de la foto, para que sirva de referencia.
Guarda todo en una carpeta con tu nombre, y nombra el archivo de la toma (sólo necesito el jpeg. el raw guárdalo) con los datos de exposición (ISO, nº f y velocidad) y del material usado (vidrio).